INAUGURACIÓN DE LA GALERÍA “LA OTRA”

Si caminas por las calles de cualquier ciudad, es seguro que vas a encontrar imágenes en sus muros,  algunos comisionados por instituciones, alcaldías y empresas; otras como resultado de un acto rebelde y desobediente, que deja huellas de actos vandálicos en propiedades privadas y públicas. Estas imágenes son creadas por artistas que piensan que la ciudad es el lugar idóneo para la perpetuación de sus mensajes y asegurarse de que sus imágenes sean vistas.

Si caminas por las calles de muchas ciudades del mundo, tal vez no puedas ver los trabajos de Ella & Pitr, seguro encontrarás grafitis en las paredes, pero de muchos otros artistas. Si miras hacia arriba tampoco los podrás ver, hay que subir a los pisos más altos de los edificios para llegar a las imágenes que esta pareja francesa ha dibujado.  Sin embargo, allá arriba no podrás ver su trabajo; es necesario seguir subiendo, quizá un helicóptero, o un avión pueda darnos la posibilidad de apreciar una imagen completa, el tamaño de sus trabajos requieren que el ojo humano llegue arriba, muy alto, para abarcar en un solo cuadro alguna de sus intervenciones.

Ella & Pitr tienen el record de pintar el mural más grande del mundo, con 21 mil metros cuadrados algo así como la superficie de dos canchas de fútbol. Este mural fue comisionado por el Festival Nuart, organizado por la ciudad noruega de Stavanger en 2015.

Este tipo de trabajos con la imagen necesitan de la tecnología para ser observados, las líneas de Nazca en Perú, por ejemplo, tuvieron que haber necesitado algún tipo de dispositivo que facilitará la visualización de la imagen completa, de lo contrario sería muy difícil imaginar cómo fueron creadas. Lo que sí está claro es que las líneas de Nazca fueron hechas para que alguien superior a nosotros las pudiera ver.

Si hacemos una revisión de la historia del arte de una manera simplificada y veloz, podemos observar que la manera en que representamos la línea del horizonte ha cambiado permanentemente, sobre todo en las imágenes que se dedican al género del paisaje como lo conocemos en la historiografía del arte occidental.  El horizonte se manifestaba como una línea, que funcionaba como el eje fundamental de la composición, separando tierra y cielo; pero cuando aparece la abstracción y todo su desarrollo durante el siglo XX a veces esa línea simplemente desaparecía y el paisaje no pertenecía más a la tierra, es decir, el paisaje pasó a ser una interpretación subjetiva de lo que entendemos como horizonte.

Hoy por hoy,  contamos con cámaras orbitando en satélites artificiales, tomando fotografías y vídeos desde el espacio con una resolución impresionante.  En este sentido vemos el paisaje desde arriba y podemos acceder a él desde el computador de nuestro escritorio. Este paisaje urbano o rural, lo conocemos y nos estamos acostumbrando a verlo desde arriba.

A diferencia de las líneas de Nazca, para Ella & Pitr, los dibujos están hechos para ser vistos por nosotros, las imágenes que nos proponen son sencillas, divertidas y apacibles; gigantes que duermen en los tejados en posiciones imposibles, con un lenguaje muy particular en su estilo.

Pero es necesario recurrir a tecnologías modernas para poderlas ver. Los trabajos de esta pareja de artistas franceses, nos regalan experiencias que van más allá de la pintura mural, son también transformaciones del paisaje urbano.

Alejandro Vásquez Salinas
Director Galería Paul Bardwell
Colombo Americano de Medellín